Interrogaciones acerca de la función de escritura en Jacques Lacan

Liliana Goya

La interrogación surge a partir de las ideas vertidas por Jacques Lacan acerca de la disyunción entre sentido y goce, y sus consideraciones acerca de la función de lo escrito.

La afirmación de Francois Jullien respecto de Confucio y su enseñanza me parece muy cercana a la que podríamos afirmar de Lacan mismo: “…ese vínculo no es sólo el de una transmisión eficaz (…), sino que también la escritura puesta en juego por el Sabio (…) es portadora de una normatividad que revela por sí misma, de un modo particularmente perceptible, el tenor de su enseñanza, que con frecuencia permanece sin explicitación” (1). Propone que la sola permanencia del texto confuciano permite comprobar la “perennidad de una enseñanza” y el “testimonio ejemplar” de una “vía de acceso privilegiada a la sabiduría”.

Sin embargo, afirma Lacan en 1973 “Por lo que a eso se refiere, digamos que no hay el más mínimo deseo de saber. Es lo que está absolutamente demostrado por la historia y, en particular, por la historia del psicoanálisis.” Pero para agregar al final “Y es en esto que me felicito de que, en los grupos, cada cual habla y aporta su experiencia; es ahí donde puede darse lo que no se concibe en nuestra idea de lo real si no es en términos de una especie de cristalización. Es ahí donde pueden producirse los puntos nudo, los puntos de precipitación que harían que el discurso analítico tuviese finalmente su fruto” (2).

Queda entonces hacer el esfuerzo por esclarecer esos “restos”, “desperdicios” del decir de Lacan que han de ser recogidos para ser interrogados, intentar entenderlos.

Referencias